Tanto en una gran compañía como en un pequeño negocio, alinear los objetivos empresariales con la productividad necesaria para ejecutarlos y el respeto por los derechos de los empleados es la columna vertebral de la actividad económica. No solo se trata de cumplir con las diversas regulaciones legales aplicables a los negocios sino de que la gestión de recursos humanos se produzca de una manera equitativa y eficiente que proteja la sostenibilidad y el crecimiento de una empresa.
Es posible que todavía a algún emprendedor con pequeños negocios les suene nuevo el concepto, pero el control laboral (o control de asistencia laboral) trata precisamente de esto: ajustar el parámetro de la productividad y la fidelidad a los contratos con un sistema que contabilice de manera fehaciente el tiempo de trabajo que cada empleado se ha comprometido a desempeñar.
Un control laboral básico se limita a llevar un registro de las horas de entrada y salida de cada trabajador en la empresa, algo que actualmente es una obligación legal. Esto se puede realizar de muchas formas, desde el arcaico libro de asistencia laboral donde cada empleado firma al entrar y salir o plantillas de Excel gratuitas hasta los modernos sistemas de control de asistencia que funcionan con la huella dactilar, el iris o una tarjeta de radiofrecuencia. Estos últimos van conectados a un software que, instalado en la empresa, permite manejar datos que van más allá de la mera entrada y salida. Al poderse archivar, exportar y clasificar muchos datos, la elaboración de nóminas, las vacaciones pendientes y muchas otras incidencias quedan a disposición del empresario facilitando enormemente la gestión de personal por parte del encargado o el departamento de recursos humanos.
Un buen control laboral no se limita a registrar, como manda la ley, los horarios de entrada y salida que pueden ser requeridos por la Inspección de Trabajo y también sirven como elemento probatorio en caso de conflicto entre empresa y trabajador, siendo igualmente útil para ambas partes. Se trata también de dar un paso más y convertir el control laboral en un gestor de recursos y productividad que dictará al empresario la necesidad de ampliar o reducir su plantilla, le mostrará el progreso de la productividad y le ayudará a tomar decisiones trascendentales en su labor.
Las ventajas de un sistema de control de asistencia laboral profesional para el empresario son evidentes:
- Garantizar el cumplimiento de la jornada.
- Atajar malas prácticas identificando a los que llegan tarde sistemáticamente a su puesto.
- Conocer el tiempo efectivo de trabajo y el dedicado a descansos.
- Ahorrar costes en personal al optimizar la producción sin necesidad de destinar la jornada de un trabajador a controlar la de otros.
- Conocer las horas extras realizadas.
- Programar vacaciones.
- Elaborar nóminas con informes fidedignos.
- Documentar el registro de la jornada laboral ante el trabajador, sus representantes y cualquier institución autorizada para requerirlo.
- Garantizar la conservación del registro de control de asistencia por el plazo de cuatro años que exige el Real Decreto-ley 8/2019.
Por su parte, los trabajadores también salen beneficiados de un control laboral fehaciente que les garantice no realizar horas extraordinarias impagadas y no declaradas como sucede aún en nuestro país con demasiada frecuencia, y les permita probarlo en caso de conflicto.
¿Cómo elegir sistema de control laboral?
Ante todo, deben considerarse las necesidades de cada empresa:
- El número de usuarios que van a utilizar el sistema de control de asistencia.
- Las incidencias que se quieran conocer además de los horarios de entrada y salida. Muchos sistemas de control ofrecen estadísticas e informes personalizados y hay que elegir en cada caso los que sean útiles.
- Precios y opciones de contratar los sistemas de control en régimen de alquiler.
- Manejabilidad del sistema y el soporte técnico que ofrezca el proveedor.
La manera más eficiente de implementar el control profesional de asistencia laboral es contratar un sistema integral. Cucorent ofrece el equipamiento adecuado para cada empresa, escalable en número de usuarios y adaptable a un amplio ranking de necesidades de los clientes. Sus sistemas (App móvil, varios controles de Presencia y de Presencia + Accesos) se pueden alquilar o adquirir a un precio ajustado, sin suplementos ni letra pequeña, y suponen para la empresa una inversión a corto plazo en realidad ya que su uso favorece la producción y el cumplimiento de objetivos en menos tiempo lo que se traducirá en una reducción de costes finales.