firmar un papel no es válido

 

Desde 2019, el registro de la jornada laboral es algo completamente obligatorio en todos los centros de trabajo con el objetivo de mejorar las condiciones laborales. Sin embargo, no todos los métodos son válidos. Ahora, la Sala de lo Social de la Audiencia Nacional ha señalado de forma expresa que firmar un papel no es válido como método de fichaje. Tras algunas denuncias de la inspección de trabajo que señalaban este problema, la Audiencia condena a una empresa a implantar un sistema de registro de jornada fiable, objetivo, que mida el tiempo real de la jornada de trabajo de cada trabajador y que sea accesible, a sus trabajadores, a la representación legal de los mismos y a la Inspección de Trabajo y Seguridad social, todo ello en el plazo de 30 días.

 

Firmar un papel no es válido, lo que dice la normativa

El texto que tenemos que tener en cuenta en este caso es el Real Decreto-Ley 8/2019, de 8 de marzo, de medidas urgentes de protección social y de lucha contra la precariedad laboral en la jornada de trabajo.

En este se señala expresamente que el registro de la jornada laboral es obligatorio. Es lo que comúnmente llamamos fichar, algo que antes solo ponían en práctica las empresas que así lo consideraban oportuno.

Desde su implementación, han sido muchos los centros de trabajo que han tenido que realizar diferentes modificaciones en sus instalaciones para poder dar a los trabajadores las herramientas con las que fichar. Sin embargo, ha habido muchas empresas que se han resistido a implementar sistemas más complejos y han optado por el fichaje papel para salir del paso.

Ya desde el comienzo de esta práctica se sospechaba que la hoja no era ni mucho menos el mejor camino para conseguir mejorar las condiciones de trabajo en muchos centros laborales. El problema es muy evidente: la firma en una hoja de papel no da un registro adecuado de la hora de entrada y salida del trabajador, y es que se puede falsear con bastante facilidad.

La disputa no tardó en llegar a los tribunales, especialmente por parte de los trabajadores de Ferrovial Servicios. Esta subcontrata de Renfe ha visto cómo desde el poder judicial se le señalaba lo que resultaba evidente: firmar un papel no es válido en ningún caso como método para registrar la jornada laboral.

 

Por qué hay que fichar

Antes de centrarnos en las alternativas que tienen las empresas para dejar de lado de una vez el fichaje papel, conviene tener claro los motivos que hacen que el registro de la jornada es obligatorio.

En España, igual que en otros países del entorno, se sabía perfectamente que había una serie de horas fantasma que no hacían que muchos trabajadores tuvieran que estar en su puesto de trabajo mucho más tiempo del debido. Estas, además, no tenían ningún tipo de transparencia, ya que había muchos casos en los que se supera el límite de horas que un empleado puede trabajar a la semana de forma legal.

De ahí la necesidad de hacer que las empresas lleven una cuenta adecuada de este dato. Fichar a la entrada y a la salida del puesto de trabajo es lo que hace que haya una cuenta exacta del tiempo que pasa un empleado en su centro de trabajo, algo con los que se consigue que se puedan seguir dando abusos como los que hemos señalado anteriormente.

Y por ello mismo el papel no es un método válido. No hay que analizar a fondo la cuestión para saber cómo se puede falsificar un papel con las horas a la que entran y salen los empleados, por lo que las autoridades no han tenido ninguna duda en este sentido a la hora de sancionar a las compañías que aún seguían con esta práctica.

 

Métodos para fichar permitidos

Si, como hemos visto, firmar un papel no es válido, entonces qué método hay que usar para que los trabajadores fichen. Lo cierto es que hay muchos gracias a diferentes aplicaciones tecnológicas que consiguen que el control de presencia sea exacto y preciso.

 

Fichaje biométrico

El fichaje biométrico se ha convertido en el mejor recurso de todos. Se trata de una serie de sistemas con los que el empleado se identifica a través de la huella digital, por lo que son totalmente personales y es imposible falsificarlos de forma alguna.

Los métodos de fichaje biométrico son un poco más costosos que otros, pero las actuales aplicaciones consiguen que resulten relativamente baratos y, en términos de precisión, son los mejores.

El empleado solo tiene que pasar su huella, cara, palma… al entrar o al salir de la oficina y la jornada laboral quedará completamente recogida sin que tenga que haber ningún tipo de interacción de otro tipo.

 

Tarjeta personal

Una variante de la biometría es la de dotar a los empleados de una tarjeta para el registro de la jornada laboral es obligatorio. Funciona con un lector y cada trabajador debe recordar usar su tarjeta cuando entra y sale. No obstante, se pueden dar casos de manipulación por no ser necesario que la tarjeta esté en uso de su titular. De esta forma, salta a la vista que la biometría sigue siendo la mejor solución en este sentido.

 

APP gestión de tiempo

Actualmente, son muchas las apps para smartphones y tablets que recogen cada uno de los pasos que damos en nuestro día a día. Aprovechando esta tecnología, hay muchas compañías que ofrecen sistemas para fichar por app de gestión de tiempo.

Lo que hace esta herramienta es recoger la geolocalización del dispositivo móvil en el momento del fichaje.

Es un recurso cómodo para todas organizaciones en especial para aquellas con profesionales que tienen que tienen movilidad, como transportistas, comerciales…

 

¿Qué sucede en una empresa que no se ficha?

Como ya hemos visto, hay muchas alternativas legales para el registro de la jornada laboral que no son el fichaje papel. Si firmar una hoja de papel no es válido, no hay que preocuparse porque existen otras muchas herramientas que sí lo son.

Pero aún hay empresas que se resisten a implementar estos sistemas aunque firmar un papel no es válido y aunque el registro de la jornada laboral es obligatorio. ¿Qué ocurre con ellas? Lo primero es que están cayendo en una ilegalidad. Fichar es obligatorio y el empleador tiene que poner los medios para que los trabajadores lo hagan sin que haya ninguna excusa que pueda aplicarse al respecto.

Este caso, una empresa que esté incumpliendo con esto quedará expuesta a diferentes sanciones económicas e incluso podrá ser fiscalizada por las autoridades de trabajo si estas lo consideran oportuno.

Desde la implementación del registro de la jornada por ley, no son pocas las compañías que han caído en sanciones por no dar a los empleados un método adecuado con el que poder fichar. Estas sanciones y multas son fáciles de evitar, y es que sale mucho más rentable disponer de un sistema adecuado con el que poder llevar el control horario obligatorio que estar pagando sanciones a las autoridades.

En definitiva, desde que el registro de la jornada laboral es obligatorio, no se puede obviar esta acción ni por parte de los empleados ni de los empleadores. Poco a poco se van despejando dudas sobre esta tarea como la de fichaje papel con una firma, algo que debe ser abandonado porque firmar un papel no es válido si seguimos la sentencia de la Audiencia Nacional.