En primer lugar, ¿a qué hace referencia el concepto «objetivos de un trabajador»? En realidad, al hablar de estos objetivos podríamos estar refiriéndonos al aporte que debe hacer un empleado para promover el rendimiento del equipo. Pero también al cumplimiento de las tareas que se le encomiendan y, además, a sus propósitos personales en relación con su trabajo. A continuación analizaremos los distintos tipos de objetivos y metas y los fundamentos para definir, transmitir y alinear los objetivos de los trabajadores.
¿Qué tipos de objetivos de un trabajador podemos encontrar?
A partir de la idea de que todos los objetivos de un trabajador que integra una compañía deben enfocarse hacia la misma meta, la realidad es que cada integrante tiene, paralelamente, sus propios objetivos personales dentro de la empresa. De todas formas, se unirán con los objetivos del resto del personal para que la organización pueda alcanzar sus metas. Cada individuo es como un engranaje que deberá encajar con el resto de las piezas de la compañía, cumpliendo su propia tarea.
Los objetivos generales son amplios, y se trata de aquellos que pretenden lograr el objetivo final o meta de la empresa. Además de fijar los objetivos de un trabajador de manera individual, las corporaciones suelen fijar objetivos para departamentos o equipos, y todos sus integrantes deberán poner su granito de arena para alcanzarlos. Por ejemplo, uno de los objetivos de un departamento de marketing puede ser la prospección para ampliar el número de contactos de clientes potenciales, para que luego el departamento de ventas los convierta en clientes efectivos y ese será uno de sus principales objetivos.
Los objetivos individuales, por su parte, son aquellos que cada persona debe cumplir por sí misma, a través de las tareas asignadas correspondientes a su puesto en la empresa. Siguiendo con el ejemplo del departamento de marketing, un objetivo de un trabajador puede ser la conversión a contactos de los usuarios que leen el blog o ingresan al sitio web de la empresa.
Objetivos profesionales a largo plazo de un empleado o trabajador
Este tipo de objetivos está relacionado con la proyección que hace una persona en cuanto a su desarrollo profesional, tanto dentro de la empresa como en el plano de su profesión. Son trascendentales por varios motivos, principalmente por:
- El crecimiento del trabajador dentro la empresa
Por ejemplo, es posible que un empleado desee llegar a gestionar su propio equipo de trabajo dentro de la compañía. - La formación de empleados
Es muy importante que los trabajadores mantengan sus conocimientos actualizados, para que puedan conservar su competencia. Si la formación de empleados está relacionada con sus objetivos profesionales, aumentará su motivación. - La retención del talento en la empresa
Retener el talento en la empresa es posible si los trabajadores sienten que pueden crecer profesionalmente. De lo contrario, probablemente abandone la compañía para buscar otra donde pueda avanzar.
Consejos para definir y transmitir objetivos de un trabajador
La definición de los objetivos de cada empleado implica la relación de sus tareas con los resultados que se pretenden lograr, en función de las necesidades del equipo, la empresa y también de sus aspiraciones profesionales. Para llevar a cabo la tarea de transmitir los objetivos de un trabajador, es fundamental:
- Considerar los objetivos de la corporación
Para ello hay que considerar los resultados del año anterior o de los últimos meses, para obtener un total al cual deberás aplicar un porcentaje de crecimiento. En cuanto a cifras, ese será el objetivo a alcanzar. Una vez definido, es necesario analizar el aporte que cada empleado debe realizar para conseguirlo. Así se definen los objetivos de un trabajador. - Analizar el desempeño de cada trabajador durante el año anterior
Ello implica valorar sus softs skills (liderazgo, capacidad de análisis, etc.), su puntualidad, verificada mediante un sistema control de presencia efectivo, y su capacidad en cuanto a flexibilidad, proactividad, resiliencia, comodidad al actuar en un entorno digital y el compromiso que demuestre con la empresa. De ese modo, podrás reconocer en qué puntos debe mejorar cada empleado para transmitirle sus objetivos. - Tener siempre presente la adaptabilidad
Las condiciones de trabajo cambian constantemente en función del vertiginoso cambio del mundo en todos los aspectos. En este sentido, es muy importante desarrollar un plan de formación constante, destinada a que puedan trabajar con eficiencia aunque el entorno de trabajo cambie. Recientemente muchas empresas y empleados han debido establecer un acuerdo de teletrabajo, para lo cual han tenido que desarrollar un proceso de digitalización y encontrar nuevas formas de comunicarse efectivamente, de fichar por medio de apps y de contar con softwares capaces de soportar esta forma de trabajo. - Determinar objetivos coherentes y concretos
Es importante fijar objetivos empresariales en períodos de tiempo, por ejemplo, en trimestres o cuatrimestres, y también fijar los objetivos de los trabajadores en función de las prioridades. La idea es guiar a cada empleado para que sepa qué debe hacer primero para luego seguir cumpliendo etapas hasta conseguir la meta anual de la empresa, por ejemplo. Asimismo, los objetivos deben ser claros y concretos. Por ejemplo:
– Aumentar el volumen de ventas un 10 % en los próximos dos meses.
– Reducir en un 5 % la duración de la atención de las llamadas por incidencias.
– Aumentar en un 15 % el número de llamadas para concretar ventas. - Definir objetivos SMART
SMART es Specific, Measurable, Attainable, Relevant, Timely. Esta sigla hace referencia a que los objetivos deben ser específicos, medibles, alcanzables, relevantes y temporales. - Asociar los objetivos a la obtención de recompensas
Muchas empresas otorgan bonus, pagas extras porcentuales, retribución en especie y otros beneficios cuando se alcanzan los objetivos fijados. Obtenerlos dependerá del desempeño de cada trabajador, que incidirá en el rendimiento del equipo. - Realizar un seguimiento para controlar la evolución
Es poco o nada relevante fijar los objetivos a principios del año y no revisarlos hasta el final. La mejor idea es controlar su desarrollo de manera mensual, trimestral o a plazos más prolongados a lo largo del año, para evaluar el rendimiento del equipo y el individual. - Revisar los objetivos de los trabajadores
Suele ocurrir que los objetivos planteados al comenzar el año dejen de ser tan eficientes como se preveía. Por eso, será necesario replantearlos, corregirlos y/o adaptarlos a los cambios que puedan ocurrir en la empresa, en el entorno, en el sector o en el mercado. - Actuar con transparencia y honestidad
Resulta esencial que los trabajadores comprendan los motivos de las tareas y los objetivos que se fijan para ellos, para el equipo y para la compañía. De ahí la importancia de brindarles formación, herramientas adecuadas y referencias sólidas en cuanto a las personas que administran o lideran la empresa. Además, en el caso de ofrecer bonus, deben quedar muy claras cuáles son las vías para obtenerlos y en qué consisten, exactamente. - Lograr que los trabajadores se impliquen en las metas de la empresa
La dirección de la compañía conoce los resultados de los años anteriores, las prioridades, las necesidades de la empresa en plazos futuros y todos los detalles de la organización, por lo cual dispone de la visión más amplia en cuanto a la empresa y sus objetivos corporativos. Para que los empleados se impliquen en su consecución es esencial fomentar el diálogo con los empleados y escuchar sus propuestas, para estimular su proactividad y adopten los objetivos de la empresa como propios.
Apostar por tecnologías que ayudan a evaluar el desempeño
Actualmente existen sistemas y software de alta calidad para poder evaluar a los empleados desde distintos puntos de vista. Estas herramientas permiten simplificar el trabajo del Departamento de Recursos Humanos. Entre ellos están los sistemas de control de presencia, desde los que se soportan en la biometría hasta las apps destinadas a controlar los horarios en un sistema de teletrabajo. Es imprescindible adoptar sistemas modernos e interactivos, que fortalezcan el mensaje y los objetivos que las empresas desean transmitir a sus empleados, para que se sientan valorados y comprendan la importancia de su rol dentro de la organización.